Aunque creamos que estas cosas sólo pasan en las películas, con todo el movimiento que se genera en las redes P2P y la piratería era raro no haberlo visto antes. Si bien hemos visto como organizaciones anti-piratería como MediaDefender han realizado páginas fake para conseguir datos de gente que infringe copyright todavía faltaba la típica jugada a dos bandas que realizó un joven «hacker» llamado Robert Anderson.
Comenzó en el 2005 cuando TorrentSpy uno de las páginas con más autoridad a la hora de buscar torrents en la red, Robert tenía una relación con el dueño de esta página totalmente comercial y la MPAA (la organización anti piratería de lo Estados Unidos) le ofreció fama y dinero a cambio de información confidencial de la página.
Según dice el propio Robert logró adivinar una contraseña de administrador de TorrentSpy para lograr acceder a sus correos y así redireccionarlos a su casilla de correr con el fin de obtener información ilegalmente. La MPAA le entregó $15,000 y hasta hace unos días no se reveló la información que causo bastante debate ya que la MPAA «no sabía» que la información que recibía era ilegal.
En fin, un caso bastante largo de leer que podemos seguir en una exclusiva de wired, curioso como poco.